Tema: Corrupción
Categoría: Noticias
Juan Antonio Roca no llegó a Marbella con una mano delante y otra detrás. Ya era millonario antes de ser contratado en el Ayuntamiento. Eso es lo que su abogada, Rocío Amigo, trató de demostrar ayer al tribunal que juzga el 'caso Malaya' durante el interrogatorio en el que le preguntó por sus actividades profesionales y su patrimonio. «Antes de llegar al Ayuntamiento de Marbella -contestó Roca- yo tenía varias empresas y sociedades, además de un patrimonio de más de mil millones de pesetas (seis millones de euros), lo que ocurre es que la policía solo ha justificado 650. Todo esto que se ha dicho de que llegué con lo puesto forma parte de la puesta en escena de la policía», explicó el presunto cerebro de la corrupción.
Roca se quejó de la presentación que hicieron de él los investigadores de 'Malaya', que «al igual que han dicho que llegué con lo puesto se han encargado de difundir las imágenes del 'miró' en el cuarto de baño y la de la finca, que parecía que yo andaba matando y cortando cabezas de animales por ahí. Se me ha presentado como un tipo excéntrico y sin escrúpulos».
De esta manera recordó que el Ministerio de Cultura no ha tasado el 'miró' porque existen dudas sobre su autenticidad, y que la Agencia Tributaria tampoco lo ha aceptado como pago, «ni siquiera Sotheby's (casa de subasta de obras de arte)», añadió Roca.
Sobre el convenio 'Crucero Banús', Roca aseguró que se gravaron los requisitos sobre los excesos de aprovechamiento, ya que se llegaron a multiplicar por cuatro esas cesiones, que pasaron de 60 a 240 millones de pesetas. Explicó que por indicación del alcalde Jesús Gil, se elevó al 21% el porcentaje de cesión al Ayuntamiento de Marbella, cuando lo obligatorio por ley es el 10%, por lo que Roca consideró que todas las cesiones que se hayan hecho por encima del 10% no le causan «ningún perjuicio» al Ayuntamiento.
El acusado dijo que el servicio de disciplina urbanística se encuentra dentro del área de Urbanismo «y su jefe es el jefe del servicio jurídico de este área», que era Jorge González, cuya declaración como testigo ante el juez Miguel Ángel Torres en unas diligencias por delito urbanístico dio lugar al 'caso Malaya'. Cuestionado por su abogada sobre si tenía alguna influencia sobre este funcionario, Roca ha contestado irónico: «Sí, tenía muy mala influencia».
El exasesor se presentó como un empresario cumplidor con Hacienda: «Mis sociedades nunca se han caracterizado por defraudar a Hacienda. Han tributado entre 18 y 20 millones de euros».
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Juan Antonio Roca no llegó a Marbella con una mano delante y otra detrás. Ya era millonario antes de ser contratado en el Ayuntamiento. Eso es lo que su abogada, Rocío Amigo, trató de demostrar ayer al tribunal que juzga el 'caso Malaya' durante el interrogatorio en el que le preguntó por sus actividades profesionales y su patrimonio. «Antes de llegar al Ayuntamiento de Marbella -contestó Roca- yo tenía varias empresas y sociedades, además de un patrimonio de más de mil millones de pesetas (seis millones de euros), lo que ocurre es que la policía solo ha justificado 650. Todo esto que se ha dicho de que llegué con lo puesto forma parte de la puesta en escena de la policía», explicó el presunto cerebro de la corrupción.
Roca se quejó de la presentación que hicieron de él los investigadores de 'Malaya', que «al igual que han dicho que llegué con lo puesto se han encargado de difundir las imágenes del 'miró' en el cuarto de baño y la de la finca, que parecía que yo andaba matando y cortando cabezas de animales por ahí. Se me ha presentado como un tipo excéntrico y sin escrúpulos».
De esta manera recordó que el Ministerio de Cultura no ha tasado el 'miró' porque existen dudas sobre su autenticidad, y que la Agencia Tributaria tampoco lo ha aceptado como pago, «ni siquiera Sotheby's (casa de subasta de obras de arte)», añadió Roca.
Sobre el convenio 'Crucero Banús', Roca aseguró que se gravaron los requisitos sobre los excesos de aprovechamiento, ya que se llegaron a multiplicar por cuatro esas cesiones, que pasaron de 60 a 240 millones de pesetas. Explicó que por indicación del alcalde Jesús Gil, se elevó al 21% el porcentaje de cesión al Ayuntamiento de Marbella, cuando lo obligatorio por ley es el 10%, por lo que Roca consideró que todas las cesiones que se hayan hecho por encima del 10% no le causan «ningún perjuicio» al Ayuntamiento.
El acusado dijo que el servicio de disciplina urbanística se encuentra dentro del área de Urbanismo «y su jefe es el jefe del servicio jurídico de este área», que era Jorge González, cuya declaración como testigo ante el juez Miguel Ángel Torres en unas diligencias por delito urbanístico dio lugar al 'caso Malaya'. Cuestionado por su abogada sobre si tenía alguna influencia sobre este funcionario, Roca ha contestado irónico: «Sí, tenía muy mala influencia».
El exasesor se presentó como un empresario cumplidor con Hacienda: «Mis sociedades nunca se han caracterizado por defraudar a Hacienda. Han tributado entre 18 y 20 millones de euros».
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